Planteamos el curso no desde el “hay que perdonar” sino desde el “quiero perdonar para sanar y crecer”. Por eso:

Aprenderemos a aceptar, curar y transformar, para nuestro propio beneficio, el sufrimiento causado por la ofensa. 

Aprenderemos a curar nuestra memoria.

Aprenderemos a abrirnos a un interlocutor atento. 

Aprenderemos a hacerle el duelo a nuestra pérdida para que no perpetuemos la vivencia de la ofensa.

Aprenderemos a perdonarnos a nosotros mismos, y se hará posible que nos abramos al perdón del otro.

Aprenderemos a liberar al otro de nuestro juicio severo,  rehabilitándolo a sus propios ojos en su dignidad humana.

Contenido:

1. No vengarse y que cesen los gestos ofensivos.

Ejercicio: “Me visualizo perdonando a mi ofensor”

2. Reconocer la herida y la propia pobreza.

Ejercicio: “Purificar los motivos por los que perdono”

3. Compartir la herida con alguien.

Ejercicio: “Preparo una entrevista con mi ofensor”

4. Identificar la pérdida para hacerle el duelo.

Ejercicio: “Trato a mi niñ@ herido”

5. Aceptar la cólera.

Ejercicio: “Acepto mi cólera”

6. Perdonarse a sí mismo.

Ejercicio: “Tres ejercicios que me ayudarán a perdonarme”

7. Comprender al ofensor.

Ejercicios: “Para comprender al ofensor” “Tranquilizarme después de un ejercicio tan duro”

8. Encontrarle un sentido a la ofensa.

Ejercicios: “¿Y luego?” “Descubro el sentido de la herida”

9. Saberse digno de perdón y ya perdonado.

Ejercicio: “Para ser capaz de acoger el perdón”

_{Temporalización:}

Opción 1: Nueve sesiones en total a desarrollar una sesión por semana de una hora y cuarto cada una.

Opción 2: Este curso no tiene modalidad de desarrollo en jornada.

Material: Se entregará un cuaderno de trabajo.